¡Oh Virgen Santa del Carmen! Jamás podremos
corresponder dignamente a los favores y gracias que nos has hecho al darnos tu
santo Escapulario. Acepta nuestro sencillo, pero hondamente sentido,
agradecimiento y, ya que nada te podemos dar que sea digno de Ti y de tus
mercedes, ofrecemos nuestro corazón, con todo su amor, y toda nuestra vida, que
queremos emplear en el amor y servicio de tu Hijo Señor nuestro, y en propagar
tu dulce devoción, procurando que todos nuestros hermanos en la fe, con los
cuales la divina Providencia nos hace convivir y relacionar, estimen y
agradezcan tu gran don, vistiendo el santo Escapulario, y que todos podamos
vivir y morir en tu amor y devoción. Amen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario